Curiosidades viajeras: Alcantarillas con arte made in Japón

Nunca había imaginado que las tapas de las alcantarillas pudieran servir de lienzo y que pueden llegar a ser curiosos sellos distintivos de ciudades, pueblos y barrios. En Japón las tapas de las cloacas se pintan a mano y tienen tanto arte, que han llegado a convertirse en un icono del país y son un motivo de orgullo y coleccionismo.

Para evitar los resbalones de peatones y vehículos, en 1978, el país comenzó a decorar las tapas de las alcantarillas con sencillos motivos geométricos como olas, nubes o estrellas. No fue hasta 1985, cuando un ministro tuvo la creativa idea de decorar las tapas de las alcantarillas convirtiéndolas en un símbolo de distinción. Hoy el 95,5% de las localidades lucen alcantarillas molonas, de un total de 1780 municipios, 1700 lucen tapas decoradas.

Hay más de 12.000 diseños diferentes, muchos están relacionados con la historia local, representan edificios, o la flora y fauna del lugar… Puedes encontrar desde garzas, castillos, hojas de arces, flores de cerezo, el monte Fuji,… pasando por simpáticos bomberos o calamares… o la famosa gata cabezona Hello Kitty…

No toooodos los millones de tapas de alcantarillas de Japón están decoradas, son caras, su precio es el doble, y solo un 1% lo están. Se encuentran en el centro y sur del país salpicando los principales barrios, calles y distritos, y su búsqueda, se ha convertido en una especie de juego, pasatiempo o cacería. Al parecer, el número de coleccionistas aumentaba año tras año y ahora se ha disparado con la llegada de los #hashtags# y las Redes Sociales.

Allí usan el término manhoru, derivado del inglés manhole, para referirse a las alcantarillas, y llaman manholer a los coleccionistas. Son ya tantos que se celebran cumbres anuales, subastas puntuales y existe todo un merchadising dedicado a ellos… hay réplicas, cartas coleccionables gratuitas con fotos y coordenadas, aplicaciones para móviles…

Uno de estos coleccionistas lleva más de 20 años viajando por todo el país, buscando las diferentes tapas de las cloacas, fotografiándolas, investigando su origen, historia… incluso ha llegado a publicar un libro sobre ellas que se ha convertido en una especie de guía.

Las originales y artísticas tapas no son solo un diseño bonito, estamos en Japón-Plutón y son además un instrumento de precisión, ligeras y muy funcionales.

Presumen de ellas ante el mundo. Están preparadas para soportar las lluvias torrenciales de los tifones, son capaces de levantarse solas y volver solas a la posición original. Si en algún momento la tapa tuviera que levantarse del todo por desbordamientos, una estratégica escalera bloqueará el hueco impidiendo que cualquier peatón pueda caer accidentalmente por el agujero. No solo son bonitas, también son tecnológicas.

Si quieres aprender más de las tripas del sistema de alcantarillado nipón, en Tokio puedes visitar gratis el museo dedicado al tratamiento de aguas y a las cloacas… ofrecen incluso visitas guiadas al subsuelo.

No sé si es arte contemporáneo o arte callejero… habrá quien piense que es arte de mierda. Lo que sí sé es que me parece un mobiliario urbano muy original con mucho arte, que algunos diseños arrancan sonrisas y que, por dentro y por fuera, son muy muy made in Japón.